Cultivos mas resilientes con Bioestimulantes

¿Qué son los Bioestimulantes?

Los bioestimulantes son productos que contienen sustancias y/o microorganismos cuya función es estimular y fortalecer procesos metabólicos específicos dentro de la planta. Al hacer esto, mejora la tolerancia del cultivo al estrés abiótico (como la sequía y las temperaturas extremas), además de mejorar la eficiencia en el uso de nutrientes, la calidad general del cultivo y el rendimiento.

“Eso es lo bueno de los bioestimulantes. Ayudan a los cultivos a ser más resistentes al estrés abiótico, a tener una mejor eficiencia en el uso de nutrientes y más”.

Alexandre Macedo, VP Fertirrigación, Foliares & Biostimulantes de Yara 

Como los suplementos 

Una analogía útil para explicar el valor de los bioestimulantes es compararlos con la nutrición humana.

Comemos alimentos para obtener nutrientes minerales, tomamos medicamentos para combatir enfermedades y utilizamos suplementos para abordar las deficiencias de vitaminas y minerales.

Para la nutrición vegetal se aplica el mismo concepto. Los cultivos reciben fertilizantes para suministrarles nutrientes minerales y los bioestimulantes son complementarios para mejorar el rendimiento de los cultivos.

Y al igual que con la nutrición humana, estos componentes forman un programa completo de nutrición de cultivos que funciona en conjunto.

“El papel de los bioestimulantes es complementario al de otros insumos agrícolas utilizados, como fertilizantes y productos fitosanitarios. Por lo tanto, necesitamos que los bioestimulantes formen parte de un programa de cultivos integrado", afirma Antonis Angeletakis, Director de Bioestimulantes de Yara.

Contribuyendo con la Agricultura Regenerativa

Dado que la agricultura regenerativa es una parte central de los esfuerzos generales de sostenibilidad de Yara, los bioestimulantes contribuyen a todos sus pilares clave: clima, salud del suelo, uso de recursos, biodiversidad y prosperidad de los agricultores.

Al fortalecer los cultivos con Bioestimulantes, estos se vuelven más resistentes al estrés abiótico. Además, los cultivos más resistentes utilizan mejor los nutrientes, tienen un mejor crecimiento de las raíces y garantizan un alto rendimiento de los cultivos (lo que beneficia a los agricultores).

En general, la incorporación de bioestimulantes en un plan de nutrición de cultivos contribuye a garantizar un mejor rendimiento y calidad de los cultivos, y ayuda a crear un impacto positivo para el medio ambiente y los agricultores. Integrar bioestimulantes en las prácticas agrícolas significa contribuir a un futuro más sostenible, resiliente y productivo para la agricultura.